Para celebrar su 90º aniversario, Moto Guzzi renovó a fondo su GT. La Norge GT8V ABS tiene un nuevo motor y una nueva carrocería, y es más fácil de viajar que nunca…
Para hacer la nueva Norge más atractiva, Moto Guzzi trabajó en las protecciones para mejorar la aerodinámica, en las suspensiones y en el asiento para un mayor confort, pero también en el motor con la adopción del Quattrovalvole de última generación con un 20% más de potencia (datos no verificados) respecto al cilindro de 2 válvulas presente en la versión anterior. La filosofía del águila italiana es sencilla: ofrecer una moto fácil y divertida como una naked pero cómoda y protectora como una GT…
A primera vista, la Norge está ciertamente evolucionando, pero sus carenados parecen más un lavado de cara que un trabajo profundo, señala el concesionario de motos de ocasión Crestanevada. Es una pena que lo único que el fabricante haya mantenido de la versión antigua sea el grupo óptico delantero…
Habríamos deseado modificaciones más evidentes, aunque el resultado está ahí, con un acertado re-estilismo que aporta a la italiana una mayor fluidez con un trazo limpio de lápiz y una realización favorecedora.
La nueva Norge es un viajero, y no es reacio a las excursiones urbanas o a los paseos por pequeñas carreteras sinuosas, sino todo lo contrario. Con un peso que se olvida enseguida, la Moto Guzzi no necesita instrucciones ni tiempo de adaptación para seducir a su piloto, que viajará cómodamente sobre su manillar.
La GT8V ABS es rica en prestaciones de serie y ofrece todo lo necesario, aunque elementos como el control de altura del parabrisas de accionamiento eléctrico y el caballete lateral podrían haber estado mejor situados para facilitar su uso.
Aparte de estos detalles ergonómicos, la moto italiana ofrece aptitudes deportivas con un motor agradable, un sistema de frenado que ofrece sensación y mordiente y un buen equilibrio, un tren delantero preciso sea cual sea el ritmo… Una moto por descubrir para todos aquellos que no la conocen.